“La Primera Revolución es la revolución de la Conciencia” fue unas de las frases en las que el Presidente del Instituto Venezolano de Investigación José Albarrán, enfatizó durante su participación en el II Encuentro Internacional Economía Política y Derechos humanos organizado por la Asociación de las Madres de Plaza de Mayo en Buenos Aires, Argentina y que se efectuó durante los días 16 17 y 18 de Octubre de 2008.
La charla giró en torno a cómo se puede alcanzar una revolución integral en Venezuela, y el papel que juega la teoría de Prout en todo este proceso. José Albarrán, expresó que al venezolano le toca enmarcarse en una revolución de sus propios esquemas y paradigmas, en especial en ese de que somos irrigadores de petróleo, puesto que no hay esfuerzo gubernamental que valga si la mayoría de la gente, por no decir los 24 Millones de habitantes, sigue pensando en el pónganme donde hay, ¿cuánto hay pa’eso?, quítate tu … pa’ ponerme yo, bueno si los demás lo hacen, ¿por qué yo no? etc…
Esta falta de identidad y vicios que han ido sin duda en detrimento de la estructura estatal y social; la falta de una coherencia entre lo que se piensa, se dice y se hace, así como la falta de un sentido de pertenencia, han servido para desvincularnos de nuestras raíces y de los valores que distinguían al venezolano.
En cuanto al proceso económico José Albarrán dijo que éste debe ir encaminado a elevar el poder adquisitivo de la gente y a fomentar el desarrollo de todas las potencialidades humanas y supramundanas, se deben generar controles previos a las políticas y no después, ya que este mecanismo es utilizado de inmediato por esa visión materialista que genera especulación y como resultado mas inflación.
Los cambios que se están generando en esta materia y que promueve una economía solidaria no han dado los mejores resultados, debido a la falta de formación y educación integral en la materia. Se debe buscar una forma mucho mas eficiente de capacitar al venezolano, de lo contrario lo que se hace es trasladar los conflictos, vicios y problemas personales al ámbito laboral. Bien decía el Padre Arizmendarrieta, impulsor de la experiencia cooperativa de Mondragón, España que “para sociabilizar el poder había que sociabilizar el saber” y es ahí donde hay que hacer énfasis en el proceso venezolano, tenemos que dejar de reaccionar para revolucionar nuestras conciencias y así embarcarnos todos juntos en ese paso de transformación y construcción de una Venezuela unida.
Todo proceso tiene una fase de maduración, no podemos pretender construir una revolución a punta de patillitas e inmediatez. Si no cambiamos los hábitos que nos han llevado hasta ese individualismo y materialismo que predomina hoy, será difícil salir del rentalismo y del consumismo.
Los grandes maestros no se han equivocado al decir que la realidad es un espejo de nuestro interior, si no nos ocupamos en ver que estamos proyectando al exterior de nosotros mismos, si no nos hacemos responsable de lo que emitimos y de la basura que lanzamos hacia fuera en definitiva será esa misma basura lo que vendrá de vuelta a nosotros.
El presidente del Instituto Venezolano de Investigación de Prout José Albarrán resaltó, la importancia que tiene para la organización el promover alternativas como la teoría de PROUT, la cual puede ofrecer una vía clara al Capitalismo de las multinacionales y ayudar a construir una revolución integral y endógena en Venezuela.